El 5 de mayo de este año se han celebrado lo que vienen a ser los premios Óscar de la moda, en Nueva York. Rara es la celebritie del momento que se pierde un evento de estas características, que es una oportunidad como ninguna otra de pasear por la alfombra roja, dejarse ver, y recordar al gran público “Eh, aquí sigo.” En esta ocasión se rendía un homenaje al diseñador Charles James, y cientos de estrellas del firmamento hollywoodiense posaron para los flashes de fotógrafos del todo el mundo.

Entre ellas estaban Naomi Watts, Gisele Bundchen, Ryan Reynolds… la lista es enorme. Y, ¿quiénes no faltaron a la cita con la moda en el Metropolitan Museum of Art? Pues Dakota Johnson, deslumbrante con un vestido de Jason Wu y guantes altos por encima del codo, Rita Ora, vestida de color champán por Donna Karen Atelier, y Matt Bomer, más guapo que nunca con un traje de Calvin Klein.

Rita Ora protagonizó uno de los momentos más hilarantes de la gala, y no precisamente por haber dejado asombrado a todo el mundo con su vestido (de hecho, ¡ha sido una de las consideradas peor vestidas!). Pero no es sólo que haya hecho una mala elección de vestuario, sino es que, además, se le ocurrió ajustar lo complicado de la falda que llevaba, o de cola, porque no entiendo muy bien cómo está estructurado el vestido, y dejó ver sus bragas. O su faja, se ha dicho de todo.

Ay, la pobre Rita, que no hacemos carrera de ella…

La que no defraudó fue Dakota Johnson. Los titulares de la prensa americana han dicho: Dakota Johnson hace que Jason Wu se sienta orgulloso. Y no es para menos, madre mía lo bien que le quedaba el traje. Juntos han posado en la alfombra roja, y hasta se han hecho algún que otro selfie juntos.

Es curioso como Dakota Johnson, que se tiñó el pelo de castaño para interpretar su papel de Anastasia Steele en la película Cincuenta sombras de Grey, la adaptación de la famosísima trilogía erótica de Erika L. James, no ha vuelto aún a su rubio natural. Al menos no del todo. Parece que la actriz, hija de los también actores Melanie Griffith y Don Johnson, se siente cómoda con el nuevo color de pelo. Y es que le queda realmente bien. Quién sabe, si es que en el fondo ha encontrado una conexión con la joven de Portland…

Os dejo aquí una galería con las fotos de nuestros protagonistas. A ver si de aquí a unos días algún periodista revela algún detalle que le hayan contado, aunque sea, como dirían los americanos, off the record, porque digo yo que toda la noche allí de fiesta, se les habrá soltado la lengua en algún momento. La presión es espantosa, y todos nos morimos de ganas de conocer más detalles de la película.

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